 |
| Adolf Hitler (Adolfo Hitler). |
Adolf Hitler; fue un político militar y canciller imperial y Führer (jefe, caudillo, conductor). Nació el veinte de abril de mil ochocientos ochenta y nueve (1889), en Braunau am Inn, en el imperio austrohúngaro (Austria-Hungría), actualmente Austria.
De una familia católica de clase media, su padre Alois Hitler; un agente de aduanas y su madre Klara Pölzl, eran primos.
Hitler fue el tercero de siete hijos, pero sólo él y su hermana Paula llegaron a la edad adulta.
Estudiante mediocre, solo sacaba buenas notas en dibujo. Su padre muy estricto contrastaba con lo cariñosa que era su madre.
Querían que también fuera funcionario de aduanas, pero Adolf prefería el arte.
Con la muerte de Alois el tres de enero del mil novecientos tres (1903), Hitler decide dejar los estudios a los dieciséis años para dedicarse a la pintura. Viaja a Viena para ingresar en la academia de bellas artes, aunque nunca consiguió entrar.
Unos años después; su madre fallece por un cáncer y Adolf malvivió en la capital austriaca vendiendo sus cuadros.
Hitler se trasladó a Munich y eludió el servicio militar durante años, hasta que lo localizaron y fue llamado a filas, pero fue declarado no apto.
El veintiocho de julio de mil novecientos catorce (1914), estalló la primera guerra mundial. Hitler se enroló en el ejército voluntariamente marchando al frente occidental, designado como mensajero del decimosexto regimiento de infantería bávaro de reserva.
Por un ataque de gas mostaza quedó ciego temporalmente. Fue condecorado con cruces de hierro al mérito militar que luciría con orgullo años más tarde.
Acabada la guerra con la derrota de Alemania, Hitler sufrió un duro golpe.
Cuando se recuperó, permaneció en el ejército en calidad de educador de las tropas, dedicándose a predicar el ideal nacionalista (anticomunista) impartiendo numerosas conferencias.
Sus ideas se fueron volviendo más fanáticas, desencantado con el nuevo régimen democrático de la República de Weimar, a cuyos políticos acusaba de haber traicionado a Alemania aceptando las humillantes condiciones de paz del Tratado de Versalles.
Para mil novecientos diecinueve (1919), Hitler ya era un V-Mann (Verbindungsmann); un espía del ejército.
 |
| Al-Husseini, el Gran Muftí de Jerusalén y presidente del Consejo Islámico Supremo junto con Adolf Hitler, 1941 |
Una de sus misiones fue la investigación de un pequeño partido político llamado Partido Obrero Alemán (DAP), dirigido por Anton Drexler, de ideología nacionalista y de extrema derecha.
Hitler no tardó en convertirse en el dirigente principal, rebautizándolo como Partido Nacionalsocialista de los Trabajadores Alemanes. Su ideología se alimentaba de los temores de las clases medias alemanas ante la incertidumbre del mundo moderno.
Poco después creó el Sturmabteilung, conocidos como SA o camisas pardas, un grupo de asalto formado por veteranos de guerra, los cuales comenzaron a atacar violentamente a grupos políticos opositores y judíos.
En ese mismo año, Hitler adopta la Hakenkreuz (cruz gamada) o esvástica, también se le conoce como suástica y el saludo fascista italiano del brazo en alto extendido.
Ya a principios de mil novecientos veintiuno (1921), Adolf; gran orador, consiguió aumentar las filas de su partido gracias a sus discursos polémicos contra grupos marxistas y judíos, convirtiéndolos en los causantes de la guerra perdida y la crisis económica como cabezas de turco.
Alentado por el rápido crecimiento, resolvió tomar le poder por la fuerza con la idea de doblegar al gobierno nacional, pero fracasó.
Fue detenido, juzgado y condenado a cinco años por alta traición a la patria, aunque tan sólo pasó en la cárcel nueve meses, tiempo que aprovechó para plasmar sus ideas políticas extremistas en un libro que tituló Mi Lucha (Mein Kampf), una autobiografía que diseñaba las grandes líneas de su actuación posterior.
A la salida de prisión, Hitler reconstituyó el Partido Nacionalsocialista rodeándose de un grupo de colaboradores fieles como Göring, Goebbels, Himler (Jefe de las SS, mismas que se les consideraba peor que la Gestapo) y creando diferentes instituciones.
La gran depresión del veintinueve y las dificultades políticas de la república de Weimar, prometiendo empleos y derogando el Tratado de Versalles, le proporcionaron una audiencia creciente, dispuestos a escuchar su propaganda demagógica, envuelta en una parafernalia de desfiles, banderas, himnos y uniformes.
Combinando hábilmente la política con el uso ilegítimo de la violencia en las calles, los nazis fueron ganando peso electoral, hasta que Hitler fue nombrado jefe del gobierno por el presidente Hindenburg (Paul von Beneckendorff und von Hindenburg) en mil novecientos treinta y tres (1933).
Tras la muerte de Hindenburg, Hitler se proclamó Führer de Alemania. Con poca fuerza al principio, fue moviendo los hilos para allanar el terreno al poder total.
Anunció unas nuevas elecciones parlamentarias y con el incendio del Reichstag, declaró el estado de emergencia en el país y lo consiguió.
El veintiuno de marzo de mil novecientos treinta y tres (1933), Adolf Hitler inauguraba el primer parlamento del Tercer Reich y dos días después era aprobada una ley que otorgaba el poder casi absoluto hacia su persona.
 |
| Hitler y Hindenburg durante las celebraciones del 1 de mayo de 1933 |
Con total libertad en el poder, Hitler rearmó al ejército y aumentó su capacidad. Firmó alianzas con Italia, Japón, Hungría, Bulgaria y Rumanía, más conocidas como potencias del eje (… del mal).
En mil novecientos treinta y seis (1936), estalla la guerra civil española y Hitler usará a España como campo de pruebas con sus nuevos aviones con el pretexto de ayudar a Francisco Franco en su golpe de Estado contra la república. Será la primera vez en la historia en que se bombardeen núcleos civiles.
Después de anexionar Austria y los Sudetes, con la invasión de Polonia, Hitler comienza la segunda guerra mundial. Invade Francia, Países Bajos y Bélgica y persuade a Mussolini (Benito Amilcare Andrea Mussolini) para que se una a la guerra.
Con cada triunfo alemán, más deportados viajan en trenes a los campos de concentración o son ejecutados in situ.
La Alemania nazi, bombardea entonces las principales ciudades de Gran Bretaña y las bases estratégicas del sur del país. A su vez intentaban la invasión de Rusia, la cual fue fallida debido sobre todo al invierno anticipado.
En mil novecientos cuarenta y uno (1941), Hitler declara la guerra a EE.UU. después de que Japón bombardeara Pearl Harbor. Esto conlleva a que Gran Bretaña, Estados Unidos y la Unión Soviética se alíen en contra del eje.
A partir de aquí el futuro expansionista de Hitler, empieza a perder fuelle (poder), con los rusos ganando terreno por el frente oriental y el desembarco de Normandía por el occidental.
Algunos de los oficiales más realistas, decidieron conspirar contra Hitler para acabar la guerra. El veinte de julio de mil novecientos cuarenta y cuatro (1944), Claus von Stauffenberg (Claus Philipp Maria Justinian Schenk Graf von Stauffenberg), colocó una bomba en la llamada guarida del lobo, pero el atentado fue fallido, solo hiriendo levemente al Führer.
Esto provocó una represión letal, con más de cinco mil detenidos y más de doscientos ejecutados, incluyendo las familias enteras de los principales conspiradores.
Con los soviéticos a pocos kilómetros de Berlín, Hitler daba sus últimas instrucciones desde su búnker debajo de la cancillería alemana.
El veintinueve de abril de mil novecientos cuarenta y cinco (1945), contrae matrimonio con su amante oficial Eva Braun y finalmente, el treinta de abril, se suicida por medio de un disparo en la cabeza junto a su esposa.
Sus cuerpos fueron incinerados por expresa decisión del Führer.
Adolf Hitler es uno de los hombres más siniestros del siglo XX, creador de una de las etapas más vergonzosas en nuestra historia y responsable de la muerte de millones de inocentes. Esperamos que estos horribles sucesos nunca jamás se repitan.
Comentarios