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| Jeff the Killer VS Slenderman. |
El callejón estaba oscuro y húmedo, solamente iluminado por la luz del teléfono de Sarah. Sintió un escalofrío, ¿qué le había sucedido la noche anterior? Era un misterio.
Sarah intentó recordar lo que había hecho, había pasado una noche divertida en el bar con amigos, nada extraño. Ahora estaba temblando sola por las calles bajo la lluvia.
Sarah se dirigió hacia su casa, recordó el atajo por el bosque y decidió cruzar. Hacía mucho frío, le pareció ver que algo blanco brillando, volvió a mirar pero ya había desaparecido. Continuó de regreso.
Este camino le recordaba a su infancia, cuando de niña solía jugar al escondite por los bosques.
"Echo de menos aquellos tiempos. Antes; cuando el mundo no era una basura"
Su voz se fue apagando. Sarah escuchó el crujido de una rama de árbol. Aterrorizada, empezó a correr desesperada por el bosque. Tropezó y cayó al suelo. Intentó levantarse pero era demasiado doloroso, se había torcido el tobillo.
"Alguien por favor… ¡ayúdeme!" Dijo en voz alta.
Quiso salir corriendo, pero no era capaz. Cerró los ojos y cuando los abrió de nuevo, un hombre altísimo de cara blanca vestido con traje se encontraba ante ella. Sarah comenzó a gritar de terror, pero pronto fue silenciada.
--- Eran las cuatro en punto.
Jeff the Killer acababa de terminar lo que él llama sus rondas diarias y tenía la ropa ensangrentada. Arrastró los pies y entró en su antigua casa y se sentó en una butaca.. Jeff sostenía dos botellas de whisky, se había convertido en una máquina de matar borracho.
El cerebro de Jeff se puso melancólico. Comenzó a recordar la noche en la que mató a su familia. Si no fuera por su loco instinto, podría haber parado. Todavía sentía algo de remordimiento por quitarle la vida a las personas a las que una vez amó. Pero su ansia de muerte era un sentimiento mucho más fuerte.
Eran las cinco de la mañana. Tomó otro sorbo de whisky, "¿pero qué hago aquí sentado?...
Salío de la casa, la noche estaba fría y húmeda. Le dio otro sorbo a la botella y noto una extraña sensación de alerta. Miró hacia el bosque, comprobó que tenía su cuchillo con él y comenzó a moverse hacía allí.
Sabía que algo no iba del todo bien. Cada vez estaba más cerca de la arboleda pero antes de entrar se fijó en el cementerio. De nuevo la melancolía llamó a su puerta. Decidió caminar hacia el panteón. Tropezó un par de veces, estaba demasiado ebrio.
Se adentró entre las tumbas y se quedó mirando las losas sin conseguir leer. Jeff comenzó a sentirse incómodo, notó como su garganta se secaba, la misma sensación de alerta de antes. Volvió de nuevo hacia el bosque, sus ojos se posaron en un árbol.
Parecía que tenía un pedazo pequeño de papel colgando de un clavo. Sus ojos borrosos, fueron incapaces de distinguir lo que ponía. Jeff se deslizó en la oscuridad lentamente.
Dando un sorbo a una de las botellas de whisky intentó ver en el bosque. Jeff admiraba la oscuridad, era la amiga perfecta para un asesino como él.
Empezó a sentirse raro. Escuchó el crujido de las hojas, sentía que algo lo estaba acechando, "¿quién anda ahí?"
Los chirridos se hicieron más fuertes, "vamos amigo, en realidad no me gustan los juegos y menos el escondite."
Se escuchó un susurro rápido. Jeff vio unas ratas.
"Malditas ratas, sólo sirven para crear plagas."
La lluvia se detuvo lentamente…
El bosque se quedó completamente en silencio, pero un fuerte ruido fue creciendo dentro de la cabeza de Jeff.
El sonido era tan intenso que casi se desmaya, Jeff dejó caer las botellas de whisky al suelo que se rompieron en mil pedazos.
Intentó enfocar en la oscuridad y le pareció ver un objeto de color blanco como flotando por encima de él, desapareció al instante.
"¿Qué demonios ha sido eso? He bebido demasiado, aquí no hay nada". El sonido agudo volvió a torturar su cabeza. "¡Quién eres?" No hubo respuesta…
Se levantó y comenzó caminar de nuevo.
"Sal, no te ocultes ahora. Voy a cortar cada árbol hasta encontrarte”.
Jeff, con la vista borrosa, señaló con el cuchillo hacia un árbol alto y delgado y lo apuñaló. Lo que él pensaba que era un árbol se desvaneció en la oscuridad.
¿Qué estaba pasando?
Miró de nuevo y descubrió que lo que tenía delante no era un árbol, no. Era un ser extremadamente alto, flaco, vestido con un traje negro.
La borrachera de Jeff se fue de repente. Cuando lo miró a la cara, descubrió que no tenía rostro. Jeff soltó una carcajada nerviosa.
"Así que eras tú el que me perseguía por el bosque ¿eh?" "No sé qué eres, pero me recuerdas a mí". "Tienes la cara blanca como yo, ¡lo único que te falta es una hermosa sonrisa!"
Jeff comenzó a reír sin control. Pero su risa paró cuando uno de los tentáculos de Slenderman se introdujo en sus orejas. el dolor intenso comenzó de nuevo, sacó su cuchillo y comenzó a apuñalarlo inútilmente. El hombre se movía como teletransportandose.
El Slenderman y Jeff comenzaron a luchar. Slenderman extendió sus tentáculos para rodearlo. Jeff los intentaba cortar con su cuchillo. Logró cortar uno de ellos, pero al instante se regeneró rápidamente.
Jeff se asustó y huyó despavorido del bosque, ese era el territorio del monstruo, jamás podría vencerlo allí.
Corrió hacia el primer árbol que había visto al principio y leyó rápidamente la nota que ponían; "No entrar en este bosque, un hombre misterioso conocido como Slenderman ha sido visto en la zona recientemente,si entra su vida está en peligro”.
Jeff se apresuró hacia el cementerio con la esperanza de que el ente no pudiese salir del bosque. Estaba equivocado. Slenderman lo esperaba entre las tumbas.
Jeff se llenó de su instinto psicópata y se tiró hacia su enemigo, arrojándolo. Jeff procedió a acuchillar de nuevo los tentáculos.
La figura blanca no mostraba emoción alguna y comenzó a pelear con Jeff una vez más. Mientras aplastaba a Jeff contra las tumbas, el cuchillo se le resbaló y desafortunadamente se deslizó en su propio estómago.
Jeff Sangraba sin parar. Se reincorporó enfurecido, ¿eso es lo mejor que tienes Slendy?" "¡Demuéstrame lo que sabes!"
El Slenderman permaneció en silencio, pero no desistió, volvió a atacarlo. Jeff arrancó el cuchillo de su estómago y lo arrojó directamente a Slenderman. La puntería de Jeff era buena y logró cortar una de sus extremidades. El brazo izquierdo de Slenderman desapareció en la oscuridad.
Jeff cayó en una de las tumbas, malamente pudo leer el nombre de su familia. La ira se apoderó de él y en un instante arremetió contra Slenderman a una velocidad increíble.
El cuchillo de Jeff se movía hábilmente contra el ser de piel pálida. Slenderman escapó hacia el bosque.
"¡Vamos, no he terminado contigo todavía! ¡Quiero ayudarte a dormir!” ¡Pareces muy cansado!"
Lleno de una ira inimaginable persiguió a Slenderman hacia el bosque. Tropezó, un magullado Jeff buscó desesperadamente su cuchillo… ¿se le había caído?
Encendió un mechero del bolsillo para buscarlo. Slenderman apareció ante él. Aunque parecía herido, Slenderman seguía siendo fuerte.
Jeff tiró el mechero al suelo mientras intentaba encontrar desesperado su arma, la mala suerte quiso que Jeff se parase donde antes se habían roto las botellas de whisky.
En cuestión de segundos, todo comenzó a arder. Jeff intentó huir del fuego pero Slenderman lanzó a Jeff contra un árbol de grandes ramas. Jeff había sido cruelmente empalado por una rama larga. La sangre brotaba de su boca mientras gritaba de dolor.
Slenderman huyó de las llamas dejando al asesino de la sonrisa arder. El fuego rodeó a Jeff. Había llegado su final…
Mark apagó la televisión, se sentó en el sofá y le dijo a Julia, su mujer:
"Cariño, han extinguido el fuego y hay una chica desaparecida, ¿vamos hasta allí a ver en qué podemos ayudar?".
"¿Podemos hacerlo en otro momento? Estoy un poco ocupada ahora Mark. Además; si la policía no puede encontrar a esa chica, ¡qué vamos a hacer nosotros?
Protestó Julia.
Mark: "¡Vamos, tengo curiosidad, cinco minutos!".
Julia: "¡Está bien, supongo, pero sólo cinco minutos!".
Mark y Julia salieron de casa hacia el bosque quemado, algo se movió hacia ellos. Parecía algo humano. Tenía graves quemaduras y llevaba una sonrisa poco natural dibujada en su rostro. Era completamente blanco y su pelo estaba chamuscado.
Se acercaron a él y Mark le gritó:
Mark: "Hey amigo, ¿necesita ayuda?"
El hombre se movió rápidamente hacia la pareja. Sacó un gran cuchillo cubierto de líquido rojo.
"Yo no, pero puedo ver que tu necesitas un poco de ayuda para irte a dormir."
Jeff puso el cuchillo en el cuello del hombre, que cayó al suelo. Su esposa comenzó a gritar…
…"No te preocupes por mí. Vete a dormir".
"Así que eras tú el que me perseguía por el bosque ¿eh?" "No sé qué eres, pero me recuerdas a mí". "Tienes la cara blanca como yo, ¡lo único que te falta es una hermosa sonrisa!"
Jeff comenzó a reír sin control. Pero su risa paró cuando uno de los tentáculos de Slenderman se introdujo en sus orejas. el dolor intenso comenzó de nuevo, sacó su cuchillo y comenzó a apuñalarlo inútilmente. El hombre se movía como teletransportandose.
El Slenderman y Jeff comenzaron a luchar. Slenderman extendió sus tentáculos para rodearlo. Jeff los intentaba cortar con su cuchillo. Logró cortar uno de ellos, pero al instante se regeneró rápidamente.
Jeff se asustó y huyó despavorido del bosque, ese era el territorio del monstruo, jamás podría vencerlo allí.
Corrió hacia el primer árbol que había visto al principio y leyó rápidamente la nota que ponían; "No entrar en este bosque, un hombre misterioso conocido como Slenderman ha sido visto en la zona recientemente,si entra su vida está en peligro”.
Jeff se apresuró hacia el cementerio con la esperanza de que el ente no pudiese salir del bosque. Estaba equivocado. Slenderman lo esperaba entre las tumbas.
Jeff se llenó de su instinto psicópata y se tiró hacia su enemigo, arrojándolo. Jeff procedió a acuchillar de nuevo los tentáculos.
La figura blanca no mostraba emoción alguna y comenzó a pelear con Jeff una vez más. Mientras aplastaba a Jeff contra las tumbas, el cuchillo se le resbaló y desafortunadamente se deslizó en su propio estómago.
Jeff Sangraba sin parar. Se reincorporó enfurecido, ¿eso es lo mejor que tienes Slendy?" "¡Demuéstrame lo que sabes!"
El Slenderman permaneció en silencio, pero no desistió, volvió a atacarlo. Jeff arrancó el cuchillo de su estómago y lo arrojó directamente a Slenderman. La puntería de Jeff era buena y logró cortar una de sus extremidades. El brazo izquierdo de Slenderman desapareció en la oscuridad.
Jeff cayó en una de las tumbas, malamente pudo leer el nombre de su familia. La ira se apoderó de él y en un instante arremetió contra Slenderman a una velocidad increíble.
El cuchillo de Jeff se movía hábilmente contra el ser de piel pálida. Slenderman escapó hacia el bosque.
"¡Vamos, no he terminado contigo todavía! ¡Quiero ayudarte a dormir!” ¡Pareces muy cansado!"
Lleno de una ira inimaginable persiguió a Slenderman hacia el bosque. Tropezó, un magullado Jeff buscó desesperadamente su cuchillo… ¿se le había caído?
Encendió un mechero del bolsillo para buscarlo. Slenderman apareció ante él. Aunque parecía herido, Slenderman seguía siendo fuerte.
Jeff tiró el mechero al suelo mientras intentaba encontrar desesperado su arma, la mala suerte quiso que Jeff se parase donde antes se habían roto las botellas de whisky.
En cuestión de segundos, todo comenzó a arder. Jeff intentó huir del fuego pero Slenderman lanzó a Jeff contra un árbol de grandes ramas. Jeff había sido cruelmente empalado por una rama larga. La sangre brotaba de su boca mientras gritaba de dolor.
Slenderman huyó de las llamas dejando al asesino de la sonrisa arder. El fuego rodeó a Jeff. Había llegado su final…
…Un incendio forestal se ha desatado en el área local. La causa aún no ha sido descubierta. Los investigadores están estudiando los restos del bosque. El fuego ha sido extinguido… En otras noticias, la joven Sarah Burgess se encuentra desaparecida. Fue vista por última vez en los alrededores…
Mark apagó la televisión, se sentó en el sofá y le dijo a Julia, su mujer:
"Cariño, han extinguido el fuego y hay una chica desaparecida, ¿vamos hasta allí a ver en qué podemos ayudar?".
"¿Podemos hacerlo en otro momento? Estoy un poco ocupada ahora Mark. Además; si la policía no puede encontrar a esa chica, ¡qué vamos a hacer nosotros?
Protestó Julia.
Mark: "¡Vamos, tengo curiosidad, cinco minutos!".
Julia: "¡Está bien, supongo, pero sólo cinco minutos!".
Mark y Julia salieron de casa hacia el bosque quemado, algo se movió hacia ellos. Parecía algo humano. Tenía graves quemaduras y llevaba una sonrisa poco natural dibujada en su rostro. Era completamente blanco y su pelo estaba chamuscado.
Se acercaron a él y Mark le gritó:
Mark: "Hey amigo, ¿necesita ayuda?"
El hombre se movió rápidamente hacia la pareja. Sacó un gran cuchillo cubierto de líquido rojo.
"Yo no, pero puedo ver que tu necesitas un poco de ayuda para irte a dormir."
Jeff puso el cuchillo en el cuello del hombre, que cayó al suelo. Su esposa comenzó a gritar…
…"No te preocupes por mí. Vete a dormir".
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