La Estrategia: El Pilar Esencial del Éxito en el Marketing

Estrategia: la gran olvidada del marketing que es la clave del éxito.

Los seres humanos somos propensos a dejarnos deslumbrar por lo superficial, por aquello que capta inmediatamente nuestros sentidos: un aroma, un color, un sonido gracioso, o incluso la belleza de una persona. Sin embargo, muchas veces, estas atracciones resultan efímeras y decepcionantes cuando descubrimos que la fuente no cumple con nuestras expectativas.

En el ámbito del marketing y los negocios, esta dinámica es muy común. Se conoce como "los objetos brillantes", una epidemia que seduce con su apariencia pero carece de sustancia. Estos objetos son camaleónicos, se reproducen fácilmente y se mimetizan, especializándose en destruir los sueños de quienes los siguen.

Sería fácil culpar a las redes sociales, esos canales poderosos que se han convertido en una cloaca de desinformación y superficialidad. Sin embargo, los objetos brillantes han estado presentes en el mercado desde siempre. Han evolucionado, refinado sus estrategias para engañar, y ahora son más agresivos y copiados que nunca.

Hoy en día, atraer la atención del mercado es cada vez más difícil debido a la creciente desconfianza de los consumidores, quienes han sido decepcionados repetidamente por promesas vacías. La clave no está en ser "el mejor del mercado" o en aparentarlo, sino en diferenciarse de la competencia de manera auténtica y confiable. Esto, y no el brillo superficial, es lo que realmente importa.

La Autenticidad como Diferenciador.

El problema radica en la tendencia de muchos a copiar y pegar, a buscar soluciones rápidas y plantillas prefabricadas, lo que les impide ser únicos. Es crucial entender que cada persona y cada negocio es único, y que esta singularidad es un recurso valioso. Muchos temen mostrarse tal como son, con sus defectos, pero es precisamente esta autenticidad la que los hace especiales y distintos.

En un mundo donde todos pretenden ser perfectos, la autenticidad humana —con sus triunfos y fracasos— se convierte en un diferenciador poderoso. Cuanto más auténtico seas percibido, mayor será tu capacidad de impactar a tu audiencia.

La Estrategia: El Corazón del Marketing Eficaz.

Un error común es creer que un pitch atractivo es suficiente para atraer al mercado. Sin embargo, esto es solo el primer paso de un largo camino. La verdadera clave del éxito reside en la estrategia, el gran componente olvidado en muchos proyectos.

Una estrategia adecuada es esencial para el éxito, independientemente de la calidad del producto. Este principio se ilustra perfectamente en el ajedrez, donde cada movimiento debe estar respaldado por una estrategia sólida para ganar la partida. De igual forma, en los negocios, la estrategia es fundamental para alcanzar los objetivos.

Los Tres Pilares de una Estrategia Eficaz.

Crear una estrategia no es tan complejo como algunos piensan. De hecho, cuanto más sencilla sea, mayores serán las posibilidades de éxito, siempre y cuando se base en los tres pilares fundamentales del marketing: Mensaje, Mercado y Medio.

Con la estrategia adecuada tienes posibilidades de acertar; sin una estrategia, siempre fallarás.

1. El Mensaje.

El primer pilar de la estrategia es el mensaje. Es crucial definir claramente qué vas a decirle al mercado, cómo te vas a posicionar, cuál es tu propuesta de valor, y por qué deberían confiar en ti. Es necesario tener una comprensión profunda de lo que te hace diferente y por qué eres la autoridad adecuada para abordar el tema o problema específico.

2. El Mercado.

El segundo pilar es el mercado. Debes identificar el problema, necesidad o deseo específico que puedes resolver y asegurarte de que realmente estás ofreciendo la solución que buscan. Comprender el grado de conocimiento y conciencia que tu audiencia tiene sobre su problema, y su nivel de confianza en ti, es vital.

3. El Medio.

El tercer pilar es el medio. Es fundamental planificar cómo se enterará tu audiencia de tu existencia y cómo demostrarás que no eres "más de lo mismo". Tu estrategia de contenidos y tu presupuesto publicitario deben estar claramente definidos para conectar efectivamente con tu público objetivo.

Preguntas Adecuadas para una Estrategia Sólida.

La mayoría comete el error de buscar todas las respuestas en lugar de formular las preguntas correctas. Aquí algunos interrogantes clave para cada pilar:

Mensaje:

- ¿Qué le vas a decir al mercado?

- ¿Cómo vas a posicionarte?

- ¿Cuál será tu propuesta de valor?

- ¿Por qué el mercado deberá creer y confiar en ti?

- ¿Cuál es tu autoridad para hablar de ese tema?

- ¿A quién le vas a vender?

- ¿Qué te hace diferente del resto del mercado?

Mercado:

- ¿Cuál es el problema que puedes solucionar?

- ¿Cómo sabes que esa es la solución que buscan?

- ¿Qué tanto saben esas personas del problema que sufren?

- ¿Qué tan conscientes están de él?

- ¿Cuánto conocen de ese problema?

- ¿Ya buscaron alguna solución? ¿Funcionó?

- ¿Cuál es el nivel de confianza y credibilidad establecido?

Medio:

- ¿Cómo se van a enterar de que estás ahí?

- ¿Cómo demostrarás que no eres "más de lo mismo"?

- ¿Cuál es tu estrategia de contenidos?

- ¿Cuál es tu presupuesto para publicidad y a través de qué canales la realizarás?

- ¿Cuál es el procedimiento para que obtengan lo que ofreces?

La Moraleja.

Hacer marketing no es simplemente lanzarse a vender convencido de que tienes el producto perfecto. Primero, debes identificar la necesidad que puedes solucionar con tu conocimiento y experiencia. Luego, determinar quiénes son tus clientes potenciales y cómo vas a llegar a ellos. Una vez claro esto, es momento de diseñar y validar tu estrategia, asegurándote de que funcione y de que puedas alcanzar a las personas adecuadas.

En resumen, una estrategia sólida, basada en los tres pilares del marketing —Mensaje, Mercado y Medio— es fundamental para el éxito. Aunque esta parte del marketing puede parecer aburrida y tediosa, es la base sobre la cual se construyen campañas efectivas y negocios prósperos. Así que dedica tiempo a diseñar tu estrategia, y los resultados hablarán por sí mismos.