Chebol, Príncipe del clan
Chebol, Príncipe del clan; un grupo de delincuentes organizan una serie de peleas en las que Chebol es un sanguinario golpeador de luchadores. Disfrut
Resumen:
-¿Ustedes no mezclaron nada?-
–No corras, espera tu turno en silencio, muchacho.–
Bueno, perras, las encontré.
El grupo se tambaleó en un instante. Un cóctel de estimulantes disuelto en el torrente sanguíneo, que el cuerpo produjo a un ritmo de emergencia, espoleado por los comandos del cerebro overclockeado al límite.
Dos grupos de "sistemas" proporcionaron un cálculo matemático preciso. Saliendo a la izquierda, golpe corto de abajo hacia arriba y cae un muchacho flaco, con un par de costillas rotas, con la rodilla sobre la cabeza roma de un hombre fornido, como era de esperar decidido a tirarse a sus pies.
Oh, él está tratando de levantarse, así que en su ingle, maldita sea, resultó difícil, el tipo sintió pena, pero no lo comencé. –¡Dije por el médico!–
An Mi con ojos asustados corrió hacia la salida.
-¿Qué clase de caos?- el resto de los Gopniks (grupo de delincuentes) Chek Pe se levantaron, pero de alguna manera sin mucho entusiasmo. No sabían entonces que le rompí las costillas al campeón de Seúl en Taekwondo y le rompí la cabeza al medallista de bronce del país en judo. Eso claramente enfrió el ardor de los otros seis.
Detrás de todos estos eventos, sin duda, interesantes, me perdí la épica, como la cámara mostrará más tarde, la eliminación de mi amiga Yoo Hwa.
Un par de chicas de la clase se apresuraron a ayudar al maldito chinomian y parecía que una de ellas estalló con un don curativo.
¿Quizás no todo fue tan mal concebido por Chek Pe? En vano conduje el agua y An Mi la preparó, ahora mismo se encontrarán con...
–Así, así, así… ¿y quién es ese juguetón entre nosotros? ¿Justo al anillo?- Chek Bae ni siquiera se quedó sin aliento mientras trabajaba con Yu Hwa. Maldita sea, Yoo Hwa es tan débil o...
-Bueno, al cuadrilátero, pues al cuadrilátero-, pero adónde debo ir.
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