Robert el muñeco

Robert el muñeco; la leyenda dice que fue regalado por una sirvienta al pequeño Eugene y este podía moverse solo, la película Chucky está basada en...

Robert el muñeco
Robert el muñeco.

Seguro que todos conocen la historia de Chuky, el terrorífico protagonista de la saga de películas “Muñeco Diabólico” (Child's Play). Pero a quien probablemente no conocías es a Robert, el siniestro juguete que existió en la realidad y que inspiró al personaje. 

También hay otra versión más original, inspirada en Robert the doll (Robert el muñeco), o Robert El Muñeco Embrujado o Robert el muñeco encantado; "Robert: El muñeco poseído", de 2015. 

Esta es su historia. 

Bienvenidos a un nuevo artículo halloweeniano. 

A finales del siglo XIX, los Otto; una acaudalada familia americana, cambiaron su domicilio  a una nueva mansión en Key West, Florida. 

Era sabido que solían tratar con mano dura a sus sirvientes, a veces incluso los maltrataban. Fue precisamente una de ellos, una mujer de origen bahameño (de las Bahamas) encargada de cuidar al pequeño de la familia; Robert Eugene, la que desencadenó estos sucesos. 

Un día, la señora Otto encontró supuestamente a esta sirvienta en el patio trasero de la casa practicando una ceremonia que pensó que era vudú, una magia negra habitual de las comunidades caribeñas e inmediatamente la despidió. 

Antes de irse, la mujer le regaló al niño un muñeco con apariencia de niño. Medía un metro de alto, relleno de paja y cocido con alambre, con dos botones por ojos y cabello humano, que se cree provenía del propio niño. 

Este le puso su mismo nombre y a menudo le vestía con su ropa. Robert el muñeco, se convirtió en su compañero de confianza. Se lo llevaba cuando iba de compras a la ciudad y siempre tenía un asiento reservado junto a él en la mesa, donde le pasaba bocados a escondidas de sus padres. Incluso dormían juntos. 

Pero pronto esta inocente relación se volvió un tanto extraña. 

El pequeño empezó a decir que prefería ser llamado por su segundo nombre; Gene, ya que Robert era el nombre del muñeco

A menudo se le podía escuchar en su cuarto hablando con el y una voz más baja respondía como si hubiese otra persona. 

A veces Gene montaba mucho alboroto y cuando su madre iba a ver como estaba, se lo encontraba acobardado en un rincón mientras Robert estaba sentado en una silla o en la cama, mirándolo fijamente. 

Incluso, los vecinos afirmaban que cuando la familia dejaba la casa, veían al muñeco asomándose por las ventanas. 

Gene comenzó a sufrir atroces pesadillas y les contaba a sus padres que Robert era capas de moverse por sí mismo. Sus juguetes aparecían mutilados y se oían risas extrañas. 
 
En una ocasión, mientras el niño dormía, se escuchó un estruendo en la habitación. Al ir a ver qué pasaba, se encontró la mayoría de los muebles volcados y al muñeco tirado al pie de la cama. 

Cuando sus padres preguntaban a Gene por qué hacía esas cosas, él se defendía llorando e insistiendo en que lo había hecho Robert. Asustados por estos hechos, los sirvientes empezaron a despedirse y abandonar a la familia, hasta que los Otto decidieron intervenir. 

Los padres de Gene le quitaron a Robert y lo guardaron en una caja en el ático, donde permaneció oculto durante muchos años. 

Tiempo después, Gene, que ya era adulto, heredó la mansión familiar tras la muerte de su padre y se trasladó allí a vivir con su esposa. Se había convertido en pintor y sentía que la casa era el lugar perfecto para su estudio de trabajo. Poco después se encontró a Robert en el ático y decidió recuperarlo, a pesar de que a su esposa no le hacía ninguna gracia el muñeco

Gene restableció el vínculo con su juguete de la infancia y se lo llevaba a todas partes, incluso lo sentaba en su silla favorita mientras él y su mujer dormían cerca. Entonces; los extraños sucesos volvieron a producirse. 

La esposa de Gene afirmaba que la expresión del muñeco cambiaba a veces, como si pudiese experimentar emociones. 

Algunos vecinos decían haber visto a Robert desplazándose por la casa y los niños de las escuelas cercanas evitaba pasar frente de ella. 

Los Otto dejaron de recibir visitas, nadie quería toparse con el escalofriante muñeco, así que Gene se vio obligado a guardarlo de nuevo en el ático. Pero aquellos que iban a la casa seguían afirmando que a veces se escuchaban pasos y risas inexplicables que provenían de la parte alta. 

Gene Otto murió en 1972 y su esposa rápidamente vendió la casa. Durante algún tiempo, Robert permaneció solo en la mansión vacía hasta que una nueva familia la compró y la restauró. 

El muñeco fue descubierto por la hija, una niña de diez años, que se encariñó con el y lo sumó a su colección de juguetes. Pero a este no debió gustarle su nueva dueña, porque desde entonces la pequeña gritaba de terror durante todas las noches, diciendo que el muñeco trataba de matarla. 

Finalmente Robert, fue trasladado al Museo de Fort East Martello en Cayo Hueso, Florida, donde permaneció expuesto, sentado en una urna de vidrio. Visitantes y empleados afirmaban que lo vieron moverse y que por las noches se puede oír su golpeteo contra las paredes de la urna. 
 
Uno de ellos afirma que limpió a Robert antes de apagar las luces y cerrar el museo. Y al día siguiente se encontró las luces encendidas y a Robert sentado en otra posición, con una capa de polvo en sus zapatos. 

Se dice que al fotografiarlo o grabarlo en vídeo, las cámaras dejan de funcionar o las fotos aparecen borrosas. Si quieres sacarle una, antes debes pedirle permiso educadamente. 

Si te lo concede, inclinará la cabeza. Pero si no lo hace y se la sacas igualmente, una maldición caerá sobre ti y a quien te acompañe. Lo mismo pasará si te burlas de el. De hecho en las paredes de la sala donde se encuentra hay colgadas gran cantidad de cartas con los ruegos de quienes le piden que les quite la maldición. 

A día de hoy, Robert permanece en estado de desaparecido y no tienen idea de su paradero. Antes de eso permanecía en una urna del museo, vistiendo su traje de marinero y agarrando su león de peluche, con solo un fino cristal separándolo del exterior. 

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