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| Galletas de jengibre. |
Inspirados por una de nuestras películas de animación favoritas de la saga Shrek, nos hemos decidido por hacer las tradicionales galletas navideñas del hombre de jengibre y además les vamos a dar un toque de los nuestros y hacerlas al estilo hogareño. Primero les contaremos la historia de las galletas y después la receta, que ya verás que es facilísima.
Las galletas de jengibre son un tipo de dulce realizado con pan de jengibre que suelen tener
forma más o menos de humano paticorto y sin dedos pero que también pueden tener diferentes diseños y son muy típicas de la estación navideña.
Se cree que la creación de este tipo de dulce fue idea del monje de origen armenio, Gregory de Nicópolis mientras estaba en Grecia. Al trasladarse a Francia en el año novecientos noventa y dos, se la enseñó a los sacerdotes franceses y a partir de ese momento se propagó.
La decoración de las galletas navideñas se remonta al siglo catorce, cuando se tallaban moldes de madera para hacer las galletas y se imprimían en ellas motivos bíblicos.
La elaboración de galletas con forma humana se empezó a practicar en el siglo XVI. En la corte de la reina Isabel I de Inglaterra, se regalaba a las visitas galletas de pan de jengibre con una forma similar a la de ella.
Por 1812, ya había cortadores de galletas hechos por hojalateros y muchos árboles de Navidad de la época victoriana ya se adornaban con galletas decoradas en diversas formas.
Actualmente las galletas de jengibre están extendidas por todo el mundo y son sinónimo de Navidad.
Y ahora, ¡empezamos con la receta navideña! Vamos a por los ingredientes para hacer las
galletas.
Necesitamos 260 gramos de harina, 150 gr de mantequilla, 100 gr de azúcar morena, 5 gr de bicarbonato, una cucharada de canela, un huevo, una pizca de sal y el elemento clave; jengibre. Con una cucharada de jengibre en polvo queda.
Para hacer el decorado de las galletas necesitamos una clara de huevo, 100gr de azúcar glas, el zumo de medio limón, chocolate de cobertura o un Lápiz de chocolate que es lo que nosotros vamos a usar y colorante alimentario de color rojo para los mofletes de caritas u hombres.
Ahora es el turno de los utensilios que se necesitan; un bol, un batidor, una cuchara de palo, un rodillo, una manga pastelera, un colador o tamizador, un molde redondo, también un vaso, un palillo o herramienta para decorar fondant.
Ahora; manos a la masa. En un bol vertemos la harina que tenemos que ir tamizando. Nosotros vamos a usar un colador o un tamizador. Añadimos el azúcar morena, el bicarbonato, la canela, el jengibre y una pizca de sal, que siempre potencia el sabor de los dulces.
Batimos el huevo y lo añadimos a la mezcla. Agregamos la mantequilla a punto de pomada y la mezclamos hasta tener una masa homogénea. Una vez lista toca extenderla.
Espolvoreamos un poco de harina sobre la superficie y colocamos la masa encima. La estiramos con gracia con el rodillo hasta tener medio centímetro de espesor más o menos.
Ahora toca darle forma, con un cuchillo vamos a hacer a las caritas y cuerpos de personas, pero tranquilos, que si no les sale también haremos una versión más sencilla de forma redondeada con la ayuda de un molde.
Retiramos la masa sobrante y la volvemos a extender para hacer más galletas, hasta que se acabe. Es el turno de poner nuestras galletas en el horno. Con cuidado, para que no se deformen las colocamos sobre una bandeja forrada con papel de horno. Nuestro horno es muy chiquitito. Ustedes pueden hacer más de una vez.
Introducimos las galletas en el horno precalentado a 180º c y esperamos 15, 20 minutos, hasta que estén doradas. ¡Ya están casi listas!
Las retiramos del horno y esperamos unos 15 minutos para que se enfríen, huelen demasiado bien al salir del horno y es difícil resistirse a probarlas, pero tenemos que aguantar.
Mientras esperamos a que se enfríen, vamos a preparar la cobertura para hacer la decoración. Batimos la clara a punto de nieve y añadimos poco a poco el azúcar glas y unas gotas de zumo de limón. Separamos un poco del glaseado y le ponemos colorante alimentario rojo para hacer las caritas y los monitos. Mezclamos bien y listo.
Una vez que las galletas estén frías, nos ayudamos de un vaso alto, para tener apoyada la manga pastelera mientras la llenamos de glaseado. Ahora empezamos a decorar, con caritas. Primero hacemos los bordes y después vamos rellenando hasta que quede bien cubierto. Hacemos lo mismo con el resto de las galletas.
Para el siguiente paso tenemos que dejar secar el glaseado, que tarda un ratillo, alrededor de una hora así. Cuando nuestras galletas estén bien frías, empezamos a decorarlas. Con el glaseado rojo y la manga pastelera hacemos los coloretes de las caritas y con un lápiz de chocolate vamos a hacer el resto, esperamos a que sequen el glaseado rojo y el chocolate.
Y así quedarían las galletas de jengibre de caritas y monitos o personas. No somos expertos pasteleros, pero le pusimos muchas ganas. La verdad es que son fáciles de hacer y están muy ricas, perfectas para estos días navideños.
Nos haría mucha ilusión que se animen a hacerlas y nos compartan las fotos por redes sociales. Todos los links en la descripción.
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